Gustavo Castro Soto, testigo del asesinato de Berta Cáceres, ha denunciado que la investigación solo pretende desbaratar al Copinh y no encontrar a los asesinos.
El domingo, Gustavo Castro Soto, defensor de derechos humanos herido en el asesinato de Berta Cáceres, fue interceptado cuando intentaba regresar a México.
El expresidente está ahora en libertad. Su detención provoca enfrentamientos, unos defienden a Lula y lo presentan como un “preso político”; mientras que otros aplauden la detención y apoyan la lucha contra la corrupción.