Un operativo realizado por la FELCC logró dar un ciudadano que fue víctima de plagio en su domicilio un día antes. La investigación sobre el caso continúa y no descartan que el caso esté relacionado al narcotráfico. El comandante de la FELCC indica que el monto que pedían para liberar a la víctima variaba entre 200 mil y 40 mil dólares.

De acuerdo a la explicación que dio el comandante de la FELCC de Santa Cruz, Gonzalo Medina, Nicolás Salvatierra Aramayo, ex recluso en Paraguay, José Luis Albi Rojas, ambos de nacionalidad y Freddy Giovanni Bejarano, de nacionalidad colombiana, y Gunter Guzmán Balcazar, ex recluso en Palmasola, se dirigieron a la casa de Juan Parada Ruiz donde estaba también la víctima del secuestro Gabriel Silva Cabrera.

Cuando Juan Parada Ruiz, que además es hermanastro del líder de la banda, no dejó que se lo lleven, recibió un disparo en el hombro. Es ayudado por Davico Ledezma Franco que lo deja en una clínica y después huye. El centro médico se contacta con la Policía, que fruto de ello inicia la intervención en el caso pese a que inicialmente el herido se negó a dar declaraciones.

Mientras tanto, Nicolás Salvatierra se contacta con la familia para exigir dinero a cambio de su libertad. Los negociadores y efectivos del departamento de análisis criminal e inteligencia logran que los extorsionadores se presenten en un lugar determinado para recoger el dinero y ahí los aprehenden. Los tres arrestados en el encuentro son Freddy Bejarano, Pastor River Daza Rojas, abogado que hacía también de negociador y su sobrino Alex Giovanni Mendoza que conducía el vehículo. Proceden también a aprehender a Nicolás Salvatierra.

Medina explica que la Policía recibe una información confidencial de que la víctima se encontraba en El Torno y los efectivos se dirigen allá. En una carpa instalada en tierras sin dueño encuentran a otros tres miembros de la banda que portaban armas de fuego siendo éstos Armando Bejarano, alias “El Comino” y un ciudadano presuntamente colombiano conocido como “El Menono”, quienes huyen del lugar y se internan en el monte, donde aún son buscados. Los efectivos encuentran a Gabriel Silva echado con una herida de arma de fuego en la pierna, ocasionada, según las investigaciones, cuando intentaba huir de los secuestradores.

El ministro Carlos Romero indicó que el proceso investigativo continúa y que la hipótesis “que cobra más fuerza” es que sea un caso vinculado con el narcotráfico. Esto tomando en cuenta que el incidente nunca fue comunicado a la Policía por parte de la familia, los antecedentes de las personas involucradas en el caso y que el hecho sea un acto de plagio, seguido de intento de homicidio y extorsión. Además, que según un periódico paraguayo Nicolás Salvatierra había sido plagiado y liberado en ese país.