Por día, 20 efectivos de la Fuerza Especial de la Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) son sometidos a la prueba del polígrafo (detector de mentiras) y desde la Policía boliviana se busca la forma de incrementar esa cantidad con la instalación de laboratorios móviles.

“Tenemos cinco laboratorios de polígrafo que implica (un examen a) cuatro servidores públicos policiales por cada laboratorio (…) En realidad 20 servidores están siendo sometidos al laboratorio por día, pero estamos preparando tres laboratorios móviles”, dijo Álvaro Álvarez, inspector general de la Policía Boliviana, en contacto con La Razón.

El jefe policial agregó que estos laboratorios móviles se constituirán en “diferentes áreas del país” y se instalarán en el transcurso de la semana.

“Hasta ayer habrían pasado ya 45 servidores públicos policiales (por esta prueba); para hoy están programados (otros) 20 servidores policiales y vamos a incrementar, posiblemente hasta mañana o la siguiente semana, (con los mencionados) tres laboratorios móviles”, insistió Álvarez.

La decisión de someter a la prueba del polígrafo a todos los efectivos de la FELCN fue tomada por el ministro de Gobierno, Carlos Eduardo del Castillo, después de que se denunciara sobre supuestos actos de encubrimiento al narcotráfico.

Ayer, el propio Ministro aseguró que el sometimiento a la prueba del polígrafo derivó hasta el momento en el alejamiento de una “gran cantidad de efectivos policiales” de la FELCN, por lo que la intervención ordenada está “dando excelentes resultados”.