La campaña que tenía que ser inédita por desarrollarse en medio de una pandemia no trajo muchas sorpresas: los candidatos podían haber cumplido con las restricciones sanitarias y buscar formas creativas de convencer a sus electores pero recurrieron al proselitismo tradicional. Luis Arce y Luis Fernando Camacho buscaron el voto en la calle y Mesa apostó por no hacer ruido y atrincherarse en las redes sociales. Los otros candidatos jugaron tímidamente con ambas cartas: unos cuantos viajes y propaganda digital.

Según un recuento de las publicaciones que hicieron en sus redes sociales desde el 6 de septiembre hasta el 14 de octubre, periodo habilitado por el Órgano Electoral para hacer campaña política, Luis Arce y Luis Fernando Camacho fueron los dos postulantes que hicieron actos de campaña de forma tradicional en más regiones del país.

Arce, del Movimiento Al Socialismo (MAS), hizo 51 apariciones públicas en diferentes regiones del país, seguido de Luis Fernando Camacho, de Creemos; que hizo 43. Ambos recorrieron los nueve departamentos y su foco estuvo en sus bastiones: en La Paz uno y en Santa Cruz el otro.

El candidato de Comunidad Ciudadana Carlos Mesa es el que menos actividades públicas hizo pese a que va segundo en las encuestas. Mesa centró su campaña en videoconferencias y entrevistas por medios digitales. De hecho, sus publicaciones en redes sociales lo muestran fuera de la pantalla solo ocho veces y todas sus apariciones fueron en ciudades capitales del eje troncal.

El presente informe toma en cuenta las actividades de los tres candidatos con mejor intención de voto según las encuestas y únicamente lo publicado en sus redes sociales en los 38 días que duró la campaña.

Lo que hicieron

Luis Arce y Luis Fernando Camacho son los dos candidatos que más viajaron durante la campaña y los únicos que visitaron los nueve departamentos y varios municipios. Sin embargo, se registran diferencias en las actividades realizadas en cada región.

Arce priorizó los encuentros con sectores sociales y populares. El candidato del MAS recorrió ferias y mercados y se reunió, por ejemplo, con mineros, mototaxistas y campesinos. También dejó espacio para facetas poco antes conocidas, como el deporte y la música: jugó básquet en La Paz y en muchas de sus apariciones públicas tocó guitarra y cantó.

La principal actividad de campaña del candidato del MAS fue realizar caminatas y concentraciones. A diferencia de Luis Fernando Camacho, que priorizó las caravanas en prácticamente todos los lugares que recorrió y algunas concentraciones de militantes. En la mayoría de sus viajes, muchos de ellos en avioneta, estuvo acompañado de su candidato a vicepresidente, Marco Pumari, y del candidato a primer senador suplente de Santa Cruz, Zvonko Matkovic.

Pocas reuniones del candidato de Creemos se hicieron públicas en redes sociales. Se conoció que tuvo un encuentro con el transporte pesado internacional y con profesionales, el 25 y 26 de septiembre.

Lo que tienen en común Arce y Camacho es la mayor parte de su campaña se concentró en sus bastiones electorales. Camacho recorrió casi todo Santa Cruz, departamento en el que se lo vio 22 veces y, en cambio, solo viajó una vez en La Paz. Arce estuvo más veces en La Paz (17) y Cochabamba (10) que en el resto del país.

Otra característica común en la campaña de ambos candidatos, por la naturaleza de las actividades, es que no se cumplió con las medidas de bioseguridad recomendadas para evitar el contagio de coronavirus. Si bien el Tribunal Supremo Electoral no emitió un reglamento sobre esto, pidió a los partidos cumplir con las disposiciones sanitarias para hacer frente a la pandemia.

En los eventos de Creemos y el MAS no se cumplió con el distanciamiento social y especialmente a Luis Fernando Camacho, se lo vio en prácticamente todos sus eventos proselitistas sin barbijo y en contacto directo con la gente.

Las precisamente medidas de bioseguridad son la justificación que da el entorno de Carlos Mesa para su inacción. Ricardo Paz, el jefe de campaña, le dijo a Página Siete que evitaron los eventos masivos para evitar aglomeraciones y contagios. “En una campaña electoral con estas restricciones, los líderes tienen que dar el ejemplo”, manifestó Paz.

De esa forma, Carlos Mesa centró toda su campaña en las plataformas digitales: realizó entrevistas y participó en encuentros a través de Zoom. Entre sus apariciones públicas está la asistencia a dos debates (a uno de los cuales se ausentaron sus dos principales contrincantes) y visitas a algunos medios de comunicación. Su cierre de campaña fue en Santa Cruz, región donde según las encuestas tiene poco apoyo electoral, a diferencia de los otros dos candidatos que lo hicieron en los lugares donde gozan de amplio apoyo: el candidato de Creemos lo hizo en Santa Cruz y el del MAS en El Alto.

En entrevista con el periodista Carlos Valverde, el 14 de octubre, Carlos Mesa dijo que tuvo 422 entrevistas, 90 encuentros por Zoom y que tuvo 31 actividades presenciales, el equipo de comunicación del candidato explicó a Bolivia Verifica que esos datos son desde marzo, cuando inició la cuarentena.

Tuto Quiroga, que finalmente declinó su candidatura, también se enfocó en las plataformas digitales. Estuvo en actos públicos solo ocho veces en seis departamentos. Algo que llama la atención es el cierre de campaña de Chi Hyun Chung, el candidato del Frente Para la Victoria que este año hizo una celebración evangélica en un templo de Santa Cruz, lo que contrasta con la fiesta de rock y música electrónica de la campaña del año pasado en la que hubo “cientos de asistentes” además de djs internacionales, según reportes de prensa.