A partir del lunes 1 de junio, Bolivia entrará en la nueva fase de la ‘cuarentena dinámica’, con normas más flexibles y menos restricciones, pero con el mismo objetivo de lograr la contención del coronavirus.

Así, la parte más importante de la decisión gubernamental, mediante Decreto, es que se permitirá la circulación de personas, transporte público y privado, así como el funcionamiento de gremiales y empresas de servicio de lunes a viernes, desde las 5 de la mañana hasta las 14:00 de la tarde.

Asimismo, se permite que la población vuelva al trabajo, en horario continuo. Según informó la ministra de Comunicación, Isabel Fernández, el Ministerio de Trabajo regulará los horarios de entrada y salida de las empresas e instituciones públicas; y las Alcaldías deberán hacer lo mismo con las empresas municipales y privadas.

“En todo caso, la reglamentación que se emita debe prever un ingreso y salida escalonado, eso es para evitar que haya aglomeraciones en todos los horarios”, acotó la autoridad.

Asimismo, también se permitirá la circulación de personas durante los fines de semana, entre las 6 de la mañana y las 6 de la tarde, y solo en un radio de 500 metros alrededor de sus respectivos hogares. Eso sí, está los sábados y domingos está prohibido el transporte público y privado.

No obstante, y a pesar de la flexibilización de la cuarentena, durante la nueva etapa de la ‘cuarentena dinámica’ se mantienen algunas restricciones, entre las más importantes la suspensión de las clases presenciales en todos los niveles y el cierre de fronteras.

“Todavía estamos con las actividades circulares suspendidas. No podemos dar luz verde al reinicio de las clases”, aseveró Fernández.

Respecto al cierre de las fronteras, Fernández recalcó que la única excepción es con los connacionales que regresen de otros países, cumpliendo todo el protocolo y las normas de bioseguridad establecidas.

Asimismo, señaló que siguen suspendidas todas las actividades públicas, entre deportivas, culturales, políticas, etc; sin embargo, sí se permiten la realización de eventos religiosos siempre y cuando que los lugares donde se realicen estén al 30% de su capacidad y se cumplan con los protocolos de bioseguridad.

Finalmente, la Ministra de Comunicación recordó que las Gobernaciones y las Alcaldías tendrán autonomía para restringir o endurecer algunas medidas, de acuerdo a la evaluación que realicen de las distintas zonas, distritos, comunidades y hasta municipios.

“La condición de riesgo será determinada por Gobiernos departamentales y municipales en función de parámetros e epidemiológicos definidos por el Ministerio de Salud. Podrán encapsular barrios, zonas, comunidades, distritos y municipios (…) Los Gobiernos departamentales y municipales tienen la responsabilidad de normar todo lo que concierne la circulación de las personas para fines de abastecimiento y sistemas financieros”, acotó.