El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, reiteró hoy que no existe una orden de aprehensión contra Carlos Romero y criticó a quienes de igual manera piden la detención de la exautoridad.

Entrevistado por el canal estatal, Murillo señaló que es una “barbaridad” que se exija la detención de Romero sin órden previa.

“Hay que tener claro en la población y para andar despejando cosas. No es que el aparato del gobierno, de la policía puede ir detrás de todas las personas sin orden de aprehensión. Me parece una barbaridad que la gente pida que se detenga a alguien que no tiene una orden, Romero no tiene orden de aprehensión”, aseveró.

Murillo, en ese sentido, señaló que el exministro puede transitar por todo el territorio boliviano sin problemas y aseguró que si algún momento se emita una orden de aprehensión en su contra la policía no dudará en ejecutarla.

“No podemos ir sobre la ley. No somos la ley, hacemos cumplir la ley. Cuando me den una orden (para aprehenderlo) inmediatamente nuestros equipos van a cumplir. Saquen una orden y con gusto la vamos a ejecutar”, acotó.

Las palabras de Murillo llegan después de que Romero fuera visto en la zona de Sopocachi de La Paz, lo que provocó que grupos de resistencia civil instauraran una vigilia frente a su domicilio, exigiendo su detención.