El canciller de México, Marcelo Ebrard, aclaró, a través de su cuenta de Twitter, que México denunciará a Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y no ante la Corte Internacional Penal, como había señalado en conferencia de prensa horas antes.

“Presentaremos recurso ante la Corte Internacional de Justicia para que el asedio policial y militar a las sedes de la Embajada de México en Bolivia sea suspendido. Demandamos respeto a la Convención de Viena y al Pacto de Bogotá en la materia”, señaló Ebrard en la popular red social.

Horas antes, en conferencia de prensa, había señalado que presentará un recurso ante la  Corte Penal Internacional para protestar por el “asedio” a su embajada en Bolivia.

“Se contactó a las autoridades del Gobierno (de Bolivia) y a la ONU para que se respete la convención de Viena sobre las sedes diplomáticas, así como el pacto de Bogotá. Como no hemos recibido respuesta, acorde a los principios internacionales de respeto, hoy México está presentando un instrumento jurídico ante la corte internacional, planteamos que se preserve la integridad de las instalaciones, así como de las personas que están en la embajada”, señaló Ebrard en conferencia de prensa.

El Jefe de la diplomacia mexicana señaló que la demanda en contra de Bolivia será por un posible incumplimiento de obligaciones por parte del país boliviano a la Convención de Viena y una “posible violación de un recinto diplomático”.

En la conferencia de prensa, Ebrard también relató cómo supuestamente aumentó la presencia policial alrededor de la sede diplomática mexicana en Bolivia.

“Como ustedes saben el pasado 15 de noviembre se recibieron en la embajada de México en La Paz solicitantes de asilo honrando la tradición mexicana de proteger a solicitantes, se les otorgó y se les pidió salvoconductos para abandonar el país. Hasta el 26 de noviembre, 11 días después, que se nos comunica que hay órdenes de aprehensión contra 4 asilados en la Embajada de México, de acuerdo al derecho internacional lo que domina es el derecho al asilo (…) El día 23 de diciembre aparecieron fuera de las instalaciones de la Embajada y la residencia elementos de la policía y Ejército, para que ustedes se den una idea, el número habitual son 6 y de pronto aparecieron 90”, relató.

Además, la Cancillería mexicana, a través de un comunicado, llamó a las autoridades de Bolivia a detener el "hostigamiento y la intimidación" a su personal diplomático en la ciudad La Paz y solicitó una reunión con la encargada de negocios del país andino en México.

"México reitera su exigencia al Estado Plurinacional de Bolivia para que cumpla con sus obligaciones internacionales, garantizar la inviolabilidad de las misiones diplomáticas y cesar la política de hostigamiento y amedrentamiento", afirmó la Secretaría de Relaciones Exteriores en un comunicado.

Según el gobierno mexicano, actualmente nueve personas se encuentran bajo su protección en la sede diplomática, entre ellas, cuatro que cuentan con órdenes de aprehensión, como los exministros de la Presidencia y Culturas, Juan Ramón Quintana y Wilma Alanoca, respectivamente.

Al respecto, el viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilson Santamaría, reiteró que es una decisión soberana del Gobierno disponer cuántos efectivos policiales protegerán los lugares que correspondan a su territorio.

Añadió que el operativo corresponde a lograr detener a las exautoridades que tienen órdenes de aprehensión en su contra y que se encuentran refugiados en la sede diplomática mexicana.

“Nosotros hemos puesto el personal necesario para garantizar el cumplimiento de órdenes judiciales (…) vamos a hacer lo necesario para poner ante la ley a quiénes son buscados por la justicia boliviana”, aseveró.