Los trabajadores de salud de toda Bolivia cumplen un paro de 24 horas en rechazo al Sistema Único de Salud (SUS) y en demanda de tener mejores condiciones para desarrollar su trabajo, además de la renuncia de la ministra de Salud, Gabriela Montaño, tras la muerte del doctor Gustavo Vidales a causa del arenavirus.

El presidente del Colegio Médico de Bolivia, Edwin Viruez, señaló la mañana de este viernes que los trabajadores en salud asumieron la medida por las precarias condiciones en la que se encuentra la salud boliviana, dijo, gracias a la aplicación del Sistema Único de Salud (SUS).

“Estamos asumiendo esta medida porque ya son seis meses de la implementación de una norma que advertimos no tenía el sustento para su aplicación”, señaló, en referencia al SUS.

En ese sentido, calificó a las autoridades de Gobierno como “deshumanos” ya que, dijo, que la población se encuentra muriendo “por la falta de condiciones” del SUS y llamó a las autoridades a firmar un “convenio con la gente” para modificar la implementación del seguro universal de salud.

Por su parte, el representante del Sindicato de Ramas Médicas de Salud Pública (Sirmes) de La Paz, Víctor López, señaló que “hace años” que el sector médico pide mejores condiciones para desarrollar su trabajo y aseguró que la muerte de un médico y una estudiante de medicina por el arenavirus se debe a la “precaria” situación del sistema de salud en el país.

Además, negó que el paro médico de 24 horas se trate de una medida política y mucho menos, dijo, se usa la muerte del doctor Vidales para “presionar” al Gobierno.

La ministra de Salud, Gabriela Montaño, en la previa al paro, calificó esta medida como “inhumanamente inaceptable”.

Hoy no habrá atención de consulta externa en los nosocomios públicos y de la seguridad social, solo se atenderá en Emergencia.

Según los primeros reportes, el paro se acata en La Paz y Santa Cruz, entretanto que en Cochabamba habría atención normal en la mayoría de los nosocomios.