La Policía creó hoy la nueva Dirección Nacional de Seguimiento de Casos Disciplinarios y Penales que se encargará de verificar que los procesos contra uniformados tengan conclusión rápida y sanciones ejemplares a fin de mejorar la lucha contra la corrupción y transparentar la gestión institucional.

El comandante general de la Policía, Vladimir Calderón, indicó que es necesario renovar la imagen de la institución del orden y redimir su confianza ante los bolivianos, por ello se hará seguimiento a los 37 mil policías mediante esta nueva oficina para garantizar que “sólo haya buenos policías a servicio del pueblo”.

“En muchos casos ha habido policías que incluso han sido llevados a la cárcel y luego por decisiones judiciales restituidos (a la institución del orden). Creemos que por errores procedimentales se han llegado a estos casos y lo que pedimos también al régimen judicial es que las malas conductas (de policías) sean sancionadas oportunamente”, dijo durante el acto que se desarrolló en el Comando General de esa instancia, en la ciudad de La Paz, según reportó el periódico Cambio.

Agregó que se ha pedido la revisión de la Ley 101 Ley del Régimen Disciplinario de la Policía Boliviana puesto que consideró que los procedimientos para investigar, principalmente por la vía disciplinaria, a los agentes son muy largos y morosos y se deben hacer ajustes.

“Queremos erradicar la corrupción de manera absoluta y los trámites irregulares de reincorporación de policías que incurrieron en hechos de corrupción y narcotráfico, sobre todo", indicó.

En ese sentido, fue posesionado el teniente coronel Mirko Sokol como jefe de esa unidad, quien comprometió todo su esfuerzo para ayudar a reconstruir la imagen policial.

Calderón le encomendó estudiar personalmente los casos de procesos inconclusos sobre hechos que impliquen actos contra la moral, la ética y la imagen de la institución del orden.

La Dirección Nacional de Seguimiento de Casos Disciplinarios y Penales tiene dependencia directa de la Inspectoría General de la Policía.