La principal autoridad de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), Celier Aparicio, aseguró el lunes que el jet Súper Mid-Size Gulfstream GIII, con matrícula N557JK, que fue decomisado por la Aduana Nacional, no salió de Bolivia debido a problemas de mantenimiento.

Aparicio explicó que se le otorgó dos permisos de salida a la aeronave en abril del año pasado, pero en ambas oportunidades no salió del país por problemas de mantenimiento.

"Se le otorga esta autorización y ellos no salen, probablemente porque la aeronave tenía un problema de mantenimiento", dijo en conferencia de prensa.

Indicó que, de acuerdo con la normativa nacional, aeronaves en vuelos internacionales no regulares pueden permanecer en el país 30 días como máximo.

No obstante, señaló que el 1 de agosto del año pasado se recibió el pedido de prórroga de estadía de la aeronave en territorio boliviano debido al tema del mantenimiento mecánico, por parte de un representante, pero la DGAC respondió que esa solicitud debía gestionarla el propietario.

Ante ese hecho, indicó que la DGAC envió, en febrero de este año, una nota a la Aduana Nacional para informar sobre la presencia de la aeronave.

"Finalmente nos comunican de la Aduana que la aeronave ha sido comisada", mencionó.