El representante de la FAO en Bolivia, Theodor Friedrich, destacó hoy que dentro de la región sudamericana esta es una de las naciones que más ha avanzado en la lucha contra el hambre y la pobreza.

Friedrich, quien asumió el cargo el pasado primero de febrero, resaltó al periódico Cambio los avances que en los últimos años tuvo el país en materia económica y seguridad alimentaria mediante la inclusión de los pequeños productores agrícolas, que antes estaban desconectados del desarrollo, dijo.

Recordó que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) está presente en Bolivia desde hace 40 años, y sus estrategias y objetivos son congruentes con el Plan de Desarrollo Económico y Social 2016-2020 y la Agenda Patriótica hacia el 2025 dispuestos por el Gobierno boliviano.

El país, evocó, era conocido como uno de los más pobres de la región, con una discrepancia muy grande entre pobreza y riqueza, con altos índices de hambre, pero en años pasados ha superado esta situación, ha avanzado más que otros países, precisó.

“Bolivia, alcanzó los objetivos del milenio de reducir a la mitad el hambre en la población, y estos aspectos son historias de éxito que se conocen en el exterior”, aseveró.

Y agregó que el país “es un modelo (en seguridad alimentaria), ha progresado en varias partes, como el sector indígena, por ejemplo, que antes estaba desconectado del desarrollo, era inexistente”.

El funcionario de la FAO esbozó entre los objetivos de su labor seguir apoyando al país para que progrese hasta reducir el hambre a cero, y enfrentar los retos del cambio climático.

“Tenemos un marco de prioridades acordado con el país, y dentro de esto está la seguridad alimentaria, el respaldo a la producción de la agricultura familiar sostenible, la atención a los recursos naturales como tierra, agua, suelo y bosque. Todos estos aspectos obviamente confluyen en la lucha contra el hambre y la pobreza”, aseveró.

Por otro lado, Friedrich consideró que el Centro Internacional de la Quinua que el país quiere establecer en el departamento de Oruro “es un paso relevante en el sentido de la sostenibilidad global de alimentos, pues en el mundo tenemos el problema de que cada vez producimos menos variedad de cultivos”, apuntó.