Este viernes, la representación de Chile presentó ante la Corte Internacional de La Haya, Holanda, la dúplica por la demanda marítima boliviana. El documento fue entregado por el equipo jurídico, encabezado por Claudio Grossman y los coagentes María Teresa Infante y Alfonso Silva, acompañados por el canciller Heraldo Muñoz, quien expresó su confianza en que la respuesta deja en evidencia “las debilidades del planteamiento boliviano”.

Esta es la última instancia escrita del juicio, luego se realizarán los alegatos orales finales, según Muñoz el secretario de la Corte le informó que estos se realizarían en junio del próximo año.

"Es un documento sustantivo que deja en evidencia las debilidades en el planteamiento boliviano, que ha sido con una línea argumental cambiante, de modo que en este documento hacemos presentes las inconsistencias agregando argumentos jurídicos e históricos. (…) Aquí no está en juego la soberanía territorial de nuestro país, ni tampoco el tratado de 1904 que fijó de manera perpetua los límites con Bolivia", afirmó Muñoz.

El canciller consideró también que en el proceso “se ha perdido el tiempo porque al final de cuentas la Corte ha dicho que si existiese una obligación de negociar, cosa que creemos que no existe, al final de cuentas serían los dos países quienes tendrían que decidir porque no hay un resultado predeterminado. De modo que Chile está muy confiado de sus argumentos y yo estoy muy satisfecho con el trabajo del agente, los coagentes, y los abogados nacionales e internacionales, han representado muy bien el interés soberano de nuestro país”.