Las comunidades indigenas y originario campesinas reunidas ayer en el angosto de El Bala dieron al Gobierno un plazo de 72 horas para que se paralicen las actividades relacionadas con las represas hidroeléctricas, y anunciaron que tomarán otras medidas de no ser escuchados. El pronunciamiento fue emitido ayer, 17 de octubre, luego de una reunión en El Bala en la que participaron las comunidades del norte de La Paz y del Beni.

Los pueblos Tacanas, Mosetenes, Uchupiamonas y comunidades del Parque Nacional y Área de Manejo Integrado Madidi y la Reserva de la Biósfera y Territorio Indígena Pilón Lajas en su pronunciamiento se declaran “en defensa permanente e irrenunciable de los derechos de los pueblos indígenas y comunidades originarias de las riberas de Rio Beni, Tuichi, Quiquibey, Honda y Alto Beni ante medidas que atentan, vulneran o menoscaban la identidad, cultura, formas de nuestros pueblos”.

En el documento los pueblos rechazan “de manera rotunda” los proyectos de las represas y dan un plazo de 72 horas para paralizar las obras de las represas de El Bala y El Chepete, “caso contrario tomaremos nosotros las acciones de desalojo”, dice el texto. Se rechaza también el “resentimiento, la compensación o alteración de territorios titulados y habitados de manera ancestral” y se denuncia el atentado a los derechos propios de los pueblos indígenas y las formas de vida tradicionales establecidas en la Constitución Política del Estado y la normativa nacional e internacional.

La reunión del lunes 17, se dio tras una serie de reuniones que sostuvo el personal de la Empresa Nacional de Electricidad Bolivia  (ENDE) con los pobladores que reclamaban la falta de información. Alex Villca, representante de San José de Uchupiamona, declaró que en estas reuniones “ellos hablan de información”, cuando se de debería hablar de “la consulta previa libre e informada”.

Las comunidades aseguran que “se asumirán medidas de resguardo territorial y acciones directas” y convocan a la sociedad civil a “sumarse a nuestra defensa de la Madre Tierra, nuestras áreas protegidas, los derechos y territorios de los pueblos indígenas”.

En el documento aclaran que la CPILAP  “no representan nuestros intereses y son contrarios a nuestras determinaciones, por lo tanto carecen de veracidad”. De acuerdo a Villca, el Gobierno “está argumentando que la CPILAP, la Central de Indígenas del norte de La Paz, ha dado su venia para que este proyecto vaya en curso, cosa que en San Miguel de El Bala ha sido observada y  refutada, que jamás se les preguntó en la asamblea de Buena Vista”. El pasado 21 de agosto, el Ministerio de Hidrocarburos y Energía sacó un comunicado en el afirma que la CPILAP “hizo conocer mediante Resolución Nº 4/2016 su apoyo para la construcción del proyecto hidroeléctrico El Bala”.

FIRMANTES

Entre los firmantes de este pronunciamiento de nueve puntos están: la Mancomunidad de Comunidades de los ríos Beni y Quiquibey, la Organización de Mujeres Indígenas Mosetenes, la Comunidad Originaria Carmen Florida, la Comunidad San Miguel, la Comunidad Indígena Tsimané, la Embocada del Quiquibey, la Comunidad Indígena Tacana de Villa Alcira, el Territorio y Pueblo Indígena San José de Uchupiamonas, la Comunidad San Lorenzo Chico, la Comunidad Indígena Tsimané San Bernardo, la Comunidad Villa Alcira, entre otras autoridades originarias.