En una audiencia cautelar reservada, que se realizó este sábado por la mañana se decidió determinar la detención preventiva en la carcel de San Pedro de La Paz para 10 cooperativistas detenidos durante el bloqueo en Mantecani, en la carretera La Paz - Oruro.

Terminada la audiencia, la Fiscalía informó que los  10 cooperativistas fueron acusado por seis delitos, tenencia, porte o portación ilícita de armas; atentados contra bienes públicos, atentados contra miembros de organismos de seguridad del Estado, lesiones graves y leves, además de atentados contra la seguridad de los servicios públicos.

Los cooperativistas mineros detenidos son: Jorge V., Jhonny A., Hernan C., Néstor P., Jacinto M., Vladimir A., Alberto A., Roberto O., Ramiro G. y Román Ch. La Fiscalía solicitó para ellos la aplicación de las medidas cautelares por considerar que existen riesgos procesales, tales como fuga y obstaculización del proceso.

ACUSACIÓN

La Fiscalía y el Ministerio de Gobierno presentan la acusación contra los cooperativistas. Según una publicación de este ministerio, entre  los policías que fueron agredidos algunos están muy graves; por lo que el ministro Romero aseguró que: “Vamos a pedir que se abra causa por los delitos de tentativa de homicidio, secuestro, robo, lesiones graves y gravísimas y otros delitos conexos”.   

Es el caso del coronel Franz Zegarra que sufrió una fractura múltiple en la columna vertebral. “Saltaron sobre él; los  huesos de su cadera se han desprendido, tiene fractura en la columna”, explica el doctor Álvaro Cabezas, director de la clínica Nuestra Señora de La Paz.

El cabo Alejandro Mayta, se encuentra internado en el Hospital Universitario, tiene una fisura en la pierna izquierda. “Me tropecé y me rompieron la cabeza, me aplastaron la pierna con una piedra, me arrastraron como a un animal, se turnaban para pegarme, se burlaban”, contó.

Al mayor Vladimir Peredo le rompieron las costillas, los huesos del brazo izquierdo, el tabique nasal y le causaron heridas en la cabeza que le provocaron un coágulo de sangre que los médicos tratan de evitar que dañe el cerebro.

Además de los problemas de salud, preocupa a los policías el robo de sus objetos personales y de su equipo policial; perdieron cascos, escudos, chalecos antibalas, radios, teléfonos celulares, canilleras y guantes de protección. Incluso denunciaron que se les robo los anillos de matrimonio.