El fin de semana, las personas con discapacidad cumplieron 12 días de huelga de hambre, su situación en general está muy deteriorada, la caravana llegó a La Paz en abril, para pedir al Gobierno un bono de Bs 500. El Gobierno ratificó que no conversará sobre el bono porque es inviable.

Durante un acto en Cortico, el vicepresidente Alvaro García Linera afirmó que el Gobierno está dispuesto a recibir de inmediato a los discapacitados: "Si es para hablar de empleo, salud, inversiones con gusto nos reunimos el momento que quieran, pero no es para dar el bono”.

El vicepresidente, aseguró que no es posible pagar el bono porque la economía nacional no lo permite y calificó el pedido de las personas con discapacidad como intransigente. 

"Pero si nos colocan en primer lugar el bono no va haber reunión, porque eso simplemente muestra la actitud de intransigencia (...). Volvemos a decir, no va haber bono (...) en tanto la economía no mejore no puede haber un bono, sería irresponsable hablar de un bono", aseguró.

El sábado, el ministro de Educación, Roberto Aguilar, confirmó esta posición y calificó el pedido de la caravana, como radical.

"Los aspectos de vivienda, trabajo, de salud y de educación para las personas con discapacidad están plenamente abiertos para ser tratados el momento que ellos deseen", dijo y añadió "siempre y cuando no se entre con la posición radical de que si no se toca el tema del bono no hay negociación".