La Paz, 17 de enero (Oxígeno).- El analista político, Armando Ortuño, considera que el Sí puede ganar con más del 50% en el próximo referéndum constitucional del 21 de febrero.

“Si se mantienen estas tendencias y se considera el voto en el extranjero que suele ser favorable al MAS, el Sí podría ir consolidando una victoria de alrededor del 53-54%, que es una diferencia sólida. Pero esta campaña está resultando  muy sui generis y hay que ser prudentes”, aseguró.

La mañana de este domingo, el periódico Página Siete publicó una encuesta en la que se da a conocer una pequeña diferencia a favor del Sí con el 41%.

"Los indecisos definirán la victoria de una de las opciones del referendo constitucional del 21 de febrero. El Sí tiene un respaldo del 41%, mientras que el No alcanza a 38%, según la reciente encuesta de Mercados y Muestras", informó dicho matutino. El 21% aún no definió su voto y este bloque puede inclinar la balanza a favor de  cualquiera de las dos opciones que se juegan en la consulta constitucional, complementó.

Hasta el mes de noviembre, el No a la reforma del artículo 168 de la Constitución Política del Estado   tenía un respaldo del 54%, mientras los que respaldan la modificación parcial de la Carta Magna tenían una preferencia del 40% y el porcentaje de indecisos apenas llegaba al 6%, según el diario paceño.

Respecto a la disminución del porcentaje del No en las encuestas publicadas en la última semana, Ortuño señaló que esto se debe a dos factores.

La primera, explicó Ortuño es que las encuestas empezaron a tomar más importancia del área rural. “Las tres están llegando a zonas rurales, lo q no era el caso hasta noviembre”, dijo.

“Ahora se pregunta con más claridad por una "intención de voto", una decisión/acción,  ya no una opinión o un punto de vista, la gente es entonces más prudente de definirse”, complementó.

Ortuño afirmó que la mayoría de los indecisos son electores masistas, por lo que el escenario más probable es que terminen dando al sí a una nueva reelección de la supla Morales- Linera.

“Salvo un  gran cambio, deberían in extremis ser fieles a su voto histórico.  Con eso y el voto en el extranjero, ya estaría cantada la misa”, señaló.