El presidente estadounidense Donald Trump, declaró el lunes pasado estado de emergencia en Puerto Rico, el estado de Florida y las islas Vírgenes ante la llegada del huracán Irma, de categoría 5.

Aunque la preocupación de Trump está centrada en salvaguardar a los habitantes estadounidenses, así como proteger la infraestructura, hay otra cosa por la que el presidente podría estar preocupado ante la llegada de Irma: su mansión en la isla caribeña de San Martín.

Donald Trump posee una enorme propiedad en la isla caribeña ubicada a 240 kilómetros al este de Puerto Rico, en donde en estos momentos golpea el huracán Irma con vientos máximos sostenidos de hasta 295 kilómetros por hora, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.

De acuerdo con The Miami Herald, Le Château des Palmiers, una mansión de 11 dormitorios con una cancha de tenis, suelos de mármol y cortinas de oro, es propiedad del presidente de EU.

La mansión está cotizada en 16.9 millones de dólares, según estimaciones del Washington Post.

El ojo del huracán Irma está pasando por la isla caribeña causando destrozos. De acuerdo con el presidente del territorio de San Martín, Daniel Gibbs, "nunca antes se había vivido algo parecido" en San Martín.