Redacción Oxígeno
20/10/2015 - 22:43

Santa Cruz vive una telenovela por su Reina y se descubren cálculos e intereses

Santa Cruz vive y sufre una historia apasionada de telenovela. Desde el sábado, desde hace cuatro días, las y los cruceños están pendientes de cada novedad que fue provocada por una de las comparsas carnavaleras. Los Pichones, llamados a dirigir la fiesta mayor del oriente, pasaron del cielo al infierno y desde allí este martes buscaron atenuar la perdida del brillo carnavalero 2016.

Santa Cruz, 20 de octubre (Oxígeno).- Santa Cruz vive y sufre una historia apasionada de telenovela. Desde el sábado, desde hace cuatro días, las y los cruceños están pendientes de cada novedad que fue provocada por una de las comparsas carnavaleras. Los Pichones, llamados a dirigir la fiesta mayor del oriente, pasaron del cielo al infierno y desde allí este martes buscaron atenuar la perdida del brillo carnavalero 2016.

En estos días, hubo muchísimas expresiones de la importancia fundamental que el Carnaval tiene para muchísimos cruceños. Desde la ola de críticas contra Los Pichones, pasando por los mensajes de solidaridad contra la belleza agraviada o por las preocupaciones de quienes se preguntaban qué sera del Carnaval el 2016 y hasta el punto de que la Alcaldía, indiginada por el trato que recibió Valerina la Reyna, decidió hacerse del control de la fiesta. Este martes Los Pichones dieron la cara con el fin de mantenerse como los organizadores de la fiesta, pero el "pueblo" ya había definido que Valeria Saucedo es una buena reina.

Las consecuencias de de esta novela que aun no concluye, amenazan con ser gigantes, pero de por medio está si los cruceños la ven de otra manera: 

“Indudablemente para Santa Cruz, el Carnaval es la fiesta popular más importante y que está dentro de su ideario y su actividad costumbrista con una tradición centenaria. Sin embargo, su implicancia en todos los círculos sociales ha hecho que se convierta en un juego de intereses con el manejo de altas sumas de dinero y reservado sólo para ciertos sectores de élite”, explicó el sociólogo Luis Rocha.

La nueva soberana, según versiones de ella y su familia, debía costearse vestidos, carroza y otros “detalles” con una suma básica de 80 mil dólares, a diferencia de la soberana saliente, la presentadora de televisión Anabel Angus, no contó con el privilegio de tener sponsors para paliar los gastos de su reinado.

Ante esa realidad, según reconoce, un facilitador contratado por la misma comparsa, Los Pichones, para preparar a la soberana,  tomaron la decisión “unilateral” de buscar una figura más mediática y encontraron al ex miss Bolivia, Andrea Forfori, como la reemplazante ideal.

El propio portavoz de la comparsa, Carlos Cuellar, en una conferencia ofrecida el sábado, explicó que Valeria era destituida “porque no cumplía ciertos requisitos” para su reinado, incluso aduciendo que tenía problemas de salud que le impedían estar en cada uno de los actos programados para la fiesta carnavalera.

Valeria en compañía de su madre a través de medios televisivos no ocultó su sorpresa por la decisión y al margen de afirmar que “fue un duro golpe psicológico” para ella y su familia destapó una olla que antes era un secreto a voces y que en esta oportunidad se confirmó en función a cómo se mueve la designación de la soberana.

“Cada año se designa a una comparsa coronadora para que elija a la soberana del carnaval y es la primera vez que se tiene una figura como esta que es la de destituir a una reina”, explicó el presidente de la Asociación de Comparsas Carnavaleras Cruceñas (ACCC), Joaquín Venegas.

"Lo patético de esta telenovela carnavalera -que pronto será denunciada por Scherezade por competencia desleal- es ver cómo se desnuda el nivel de los entuertos y de la socialité de farándula (...) Sigamos con el ridículo, por favor, y dejen de ayudarse, muchachos, que cuanto más aclaran, oscurece", escribió en su cuenta en facebook la reconocida cruceña Gabrielaa Ichaso.

Elegir a una reina desde la subjetividad de la comparsa

El hecho también develó que no se tiene una norma concreta que prevea este tipo de situaciones. Según Rocha, cada comparsa que es nominada como coronadora tiene la misión de escoger a la soberana en función a una serie de percepciones subjetivas y “que en este caso no están normadas” y que en su generalidad se regía en función a figuras mediáticas como es el caso de Anabel Angus.

“En descargo de Los Pichones podríamos afirmar que realmente estaban buscando a alguien con un perfil sencillo y más condescendiente con la población, pero a nivel de las empresas patrocinadoras, la nueva soberana era prácticamente una desconocida; y al final el remedio de su cambio se volvió peor que la enfermedad, se convirtió en un boomerang en su contra de los coronadores que se encuentran en el ojo de la tormenta”, recalca el sociólogo.

Tras el cambio la figura de Andrea Saucedo, que 48 horas antes era desconocida, saltó a la palestra por la reacción inmediata de la población a través de las redes sociales que pusieron contra la pared no sólo a la comparsa sino a Forfori como nueva reina.

Forfori dijo que no conocía a ciencia cierta las razones del cambio y que los directivos de la comparsa le manifestaron  que la salida de Valeria fue por razones personales.

De reina destituida a reina proclamada

Ante las arremetidas de las redes sociales rechazó el nombramiento; “yo no soy el reemplazo de nadie y me duelen mucho que me hayan juzgado sin antes escucharme”, afirmó la ex miss que radica en Estados Unidos.

Rocha explica que aunque todo este drama se ha producido con cierta casualidad generó tal repercusión que al final logró el cometido que Saucedo se convierta de la noche a la mañana en una figura pública.

“Parece como si fuera parte de un guión preconcebido que como toda novela mexicana debe tener un desenlace feliz para quienes la viven desde afuera; la figura de Valeria que fue victimizada la convirtieron en una heroína del pueblo”, agregó el sociólogo.

Precisamente, la presidenta del Concejo Municipal, el domingo anterior fue la primera en intervenir y pedir a Valeria que no renuncie nombrándola como “la soberana del pueblo” y anunciado que el Municipio organizará junto con la ACCC la denominada “fiesta grande”.

Por su parte más de 200 comparsas afiliadas reconocieron a la soberana y sugieren que se nombre a otra comparsa coronadora.

Por último este martes la comparsa Los Pichones, cuan novio arrepentido de dejar vestida y alborotada a la novia.  pidió perdón y reconciliación a Valeria.

“Valeria, nos equivocamos y fuimos sin quererlo crueles (…) todos deseamos reparar el desacierto y dependerá de ello tu generosidad y la grandeza de tu corazón. Valeria te ofrecemos una disculpa pública a vos, tu señora madre, tu familia que todo el momento te apoyó y hacemos extensiva disculpas al pueblo”, explicó Cuellar.

Ahora el desenlace del drama está en manos de Valeria que deberá tomar la decisión sobre si perdona o no a sus detractores para encausar la fiesta en medio de un panorama distinto y delante de todas las comparsas que se reunirán en una asamblea el jueves.

“Podemos pre suponer cual será el final de toda esta novela, pero para muchos quedan varias preguntas colgando, como el hecho de cómo se fiscaliza todo el movimiento económico de este tipo de fiestas, y a quienes beneficia al final, no es algo que sea muy diferente a los prestes y actividades de otras fiestas del occidente como el Carnaval de Oruro o Gran Poder que se desenvuelven en medio de grandes secretos a voces”, declaró Rocha.

Perfil: Luis Rocha, orureño de nacimiento, es Licenciado en Sociología que trabaja en la carrera de Comunicación Social de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno de la ciudad de Santa Cruz y radica en esta ciudad desde hace más de 20 años.

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