Dos novios han conseguido darse el sí, pero la boda no se desarrolló de la manera que ellos siempre habían soñado.A Ronda Mager, la novia, hace un año le diagnosticaron sarcoma epitelioide, un raro tipo de cáncer y los médicos le comunicaron que sólo le quedaban unos días de vida.

"Le pido a Dios cada día que se recupere", dijo Matthew Mager, el marido.

Ronda y Matthew que viven en Knoxville, Tennessee (Estados Unidos), llevan juntos diez años y tienen dos hijos. La pareja siempre soñó con celebrar una gran boda para contraer matrimonio. Sin embargo, no se encontraban en la mejor situación económica para hacer su sueño posible.

"Yo traje la boda a casa y he cumplido lo que siempre nos prometimos, por fin nos hemos casado", dijo Matthew.

Toda la familia sigue rezando y no perdiendo la esperanza de que ocurra un milagro y Ronda se recupere, pero a la vez se sienten agradecidos del tiempo que les queda junto a ronda, según informa Abc.

"Si se trata de una semana, un año o el resto de mi vida yo siempre estaré agradecido de compartir tiempo con Ronda", expresó Matthew. /Atresmedia