“La promulgación de proyectos y leyes de dudosa constitucionalidad, hecha sin el adecuado estudio, consenso y socialización, como debe ser en un estado de derecho y democracia plena, está causando reacciones diversas: varios sectores del pueblo han tomado medidas, con sacrificio y renuncias, para abrogar estas normativas, percibidas como vulneración a la libertad y a los derechos fundamentales, como intento de sometimiento”, señaló la Iglesia.