Cochabamba, 12 de junio (Los Tiempos).- La carretera trazada para que pase por el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) avanza, desde sus dos extremos, en los departamentos de Beni y Cochabamba. El tramo I, de Villa Tunari a Isinuta, dividido en dos fases, tiene un avance promedio de 73 por ciento, según datos brindados ayer a este medio por los responsables. Mientras que el tramo III, de San Ignacio de Moxos a Santo Domingo, también dividido en dos partes, en la primera tiene un avance de un poco más de 15 por ciento, según informó ayer el secretario de Desarrollo Vial y Obras Públicas de la Gobernación de Beni, Mario Broening.

El gobernador de Beni, Alex Ferrier, dijo el martes que para avanzar hasta Cochabamba; es decir por el medio del TIPNIS, que es el tramo II, se iniciará un proceso de consenso.

Tras el rechazo de los pueblos indígenas, en 2011, el Gobierno paralizó el proyecto, pero los tramos mencionados, igual se comenzaron a trabajar entre 2012 y 2013.

En Cochabamba, la construcción de tramo I de la carretera se extiende a lo largo de 47 kilómetros y su ejecución está a cargo de la Empresa Boliviana de Construcción (EBC) y la constructora comunitaria Asociación de Mantenimiento Vial (AMVI).

El promedio del porcentaje de avance de ambas fases es de 72 por ciento.

AMVI está a cargo de la primera fase del tramo que se extiende por 19,5 kilómetros desde Castillo hasta Santa Rosa y el trabajo tiene un avance del 80 por ciento, informó el supervisor de obra, Richard Morales.

La vía ya tiene terraplén para el colocado de las capas base de la carpeta de asfalto desde el kilómetro cero al seis  (Castillo-Chipiriri).

En tanto, el superintendente de obra de la EBC, Bernardo Rodríguez, señaló que la segunda fase del tramo, de 27,5 kilómetros, que se extiende desde Santa Rosa hasta Isinuta tiene un avance del 65 por ciento.

Actualmente, dijo, se colocan las últimas capas de la estructura del pavimento, aunque aún no se trabajó en la capa asfáltica superficial.

Tanto Morales como Rodríguez afirmaron que están dentro de plazo, aunque las lluvias son constantes en el lugar y demoran los trabajos. 

Alrededor de 80 obreros trabajan en la etapa a cargo de AMVI, cuyo presupuesto asciende los 13 millones de dólares. La misma que le corresponde a la EBC, que va desde el kilómetro 19 hasta el 47, tiene asignado un presupuesto de 19,5 millones de dólares.

La orden de proceder se emitió en octubre de 2012 y la obra debía entregarse en septiembre de este año; pero la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) hizo readecuaciones y la nueva fecha es marzo de 2016, explicó Morales.

En un recorrido realizado por este medio desde Villa Tunari hasta Isinuta se pudo constatar que en todos los puentes ambas constructoras  realizan trabajos de reforzado y empalme en los accesos. También construyen muros de contención y acomodan agregados para el compactado.

Algunos pobladores se quejan del polvo, pero no se oponen a la carretera y exigen que se concluya en el plazo establecido.

En cuanto a las licencias ambientales, los supervisores de la EBC y de AMVI coincidieron en que están en orden y fueron gestionadas por la ABC.

Respecto al tramo III, la distancia entre San Ignacio de Moxos y Santo Domingo es de 160 kilómetros y el trabajo fue dividido también en dos fases.

La primera es de unos 100 kilómetros desde San Ignacio hasta Monte Grande, donde Broening manifestó que se avanzó unos 20 a 25 kilómetros; la segunda va hasta Santo Domingo, puerta de entrada al Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), y son como 60 kilómetros. La Fuerza Binacional de Ingeniería Social Bolivia-Venezuela está a cargo de la obra.

Broening contó que ayer hizo un sobrevuelo sobre el TIPNIS junto a Ferrier y observaron que la inundación del río Ichoa dejó la zona "muy deteriorada", por lo que se trabaja para "dar transitabilidad" y están próximos a hacer el relleno y el terraplén de la vía. Para apurar la obra, la Gobernación de Beni destinará unos 30 obreros y maquinaria pesada, añadió.

Dijo que como son autoridades recién posesionadas, no dispone de datos exactos del inicio de obras ni de la cantidad de gente de la Binacional que trabaja en el lugar.

Al respecto, el exgobernador de Beni, Carmelo Lens, indicó ayer que si hay un avance de 25 kilómetros en la primera fase, "con absoluta seguridad" la Binacional comenzó a trabajar en la vía cuando él aún ocupaba el cargo.

Explicó que la Binacional trabaja en coordinación con la Agencia para el Desarrollo de las Macroregiones y Zonas Fronterizas (Ademaf), que fue creada por el Gobierno para tener una especie de "gobernación paralela" y opera bajo orden del ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana.

Hizo notar que por las características de la selva amazónica, trabajar un kilómetro de senda o de carretera lleva al menos 1 mes porque no sólo hay que hacer desmonte, sino lidiar con terreno pantanoso, lo que significa que para haber avanzado esos 20 a 25 kilómetros recibieron la orden de trabajo hace unos dos años.

"Es que la Binacional no trabaja en base a adjudicaciones transparentes, reciben instrucciones directas y trabajan con el presupuesto del Ministerio de la Presidencia que, como hicimos notar hacer tiempo, es más alto que el de Salud", apuntó.

Ayer, en conferencia de prensa, Quintana admitió que construir la carretera por el medio del TIPNIS afectará la reserva forestal, aunque aclaró que se realizan estudios para hacer el menor daño posible. Recientemente, tanto el Gobierno como los gobernadores de ambos departamentos expresaron su compromiso para construir la vía.

///