Los candidatos a la presidencia por las alianza de Comunidad Ciudadana (CC) y Libre 21, Carlos Mesa y Jorge Quiroga, respectivamente, pidieron al Tribunal Supremo Electoral (TSE) prohibir la emisión de propaganda gubernamental ya que tiene fines electorales.

“Exigimos al TSE que demuestre su neutralidad prohibiendo la propaganda electoral del ejecutivo para evitar que el gobierno despilfarre nuestros recursos en promover su imagen”, señaló, por un lado, Quiroga, a tiempo de resaltar la decisión del TSE de no dar recursos para propaganda electoral.

En esa misma línea, Mesa afirmó que el TSE debería limitar la propaganda del Gobierno, puesta que tiene un claro fin electoral y de promoción de la presidenta- candidata Jeanine Añez.

Para Mesa, el Gobierno disfraza la campaña electoral con excusa de la lucha contra la pandemia del coronavirus, según reportó RTP.

Incluso, el candidato de CC pidió que los medios estatales den un espacio para difundir la propaganda gratuita de todas las candidaturas que participarán en las elecciones del próximo 6 de septiembre.

El pasado sábado, el Tribunal Supremo Electoral propuso  que “por única vez” y solo por las elecciones generales del 2020 se deje sin efecto los artículos de la Ley de Organizaciones Políticas que contempla la distribución de recursos públicos para que las candidaturas contraten propaganda en medios masivos de comunicación.

“Se trata de una situación extraordinaria, porque extraordinarios son estos tiempos, marcadas en un deterioro de las variables económicas como consecuencia del coronavirus. Es una hora que exige desprendimientos y sacrificios, así lo ha entendido el TSE”, aseveró Romero en conferencia de prensa.

Señaló que esa situación ha sido entendida por las organizaciones políticas que participarán de las elecciones del próximo 6 de septiembre y reveló que el ahorro, de cumplirse con su pedido, sería de 35 millones de bolivianos.

No obstante, Romero señaló que esos 35 millones de bolivianos debería seguir contemplado en el presupuesto presentado por el TSE para las elecciones, de 201 millones de bolivianos, de  manera que así “únicamente” se requeriría 14 millones de bolivianos adicionales para las próximas elecciones.