De manera sorpresiva, el presidente en ejercicio del Estado, Víctor Boda, posesionó a Vladimir Yuri Calderón Mariscal como el nuevo Comandante General de la Policía boliviana. Calderón reemplaza en el cargo a Rómulo Delgado, que duró menos de cuatro meses en el cargo.

El acto de posesión se realizó en la Casa Grande del Pueblo y también contó con la presencia de los ministros de la Presidencia y de Gobierno, Juan Ramón Quintana y Carlos Romero, respectivamente.

“Estoy consciente que la responsabilidad es mayor en la actual coyuntura que vivimos (…) A partir de hoy, reafirmo el respeto y voluntad de servicio a la Constitución Política del Estado, a la sociedad, a la institución del orden”, señaló Calderón en su discurso.

Por su parte, el ministro de gobierno, Carlos Romero, reconoció y agradeció la labor de Rómulo Delgado como Comandante de la Policía y aclaró que su salida no se debe a hechos de corrupción de su persona.

“No hemos recibido denuncias de irregularidades o corrupción del general Delgado, lo aclaro para evitar especulaciones”, dijo.

Agregó que el cambio es parte de la evolución de los retos de la Policía nacional.

La nueva autoridad de la institución del orden fungió como agregado policial en Estados Unidos (EEUU) y obtuvo la mejor calificación en la lista de ascensos que se remitió al Legislativo el 20 de diciembre pasado, con 6.414,67 puntos.