La Paz, 06 de octubre (Oxígeno).- Los dos autores de una investigación sobre América Latina, a partir de los cables filtrados por Wikileaks, publicaron este martes un artículo en el que niegan que hayan afirmado que el Gobierno de Estados Unidos haya estado involucrado en un plan de magnicidio del presidente Morales o que hayan estado relacionados directamente con un plan de golpe de Estado. Sin embargo, aseguran que la embajada estadounidense en La Paz estaba relacionada con los líderes de la oposición en agosto y septiembre de 2008, cuando la administración de Morales estaba en su momento más débil.

El mensaje de Alexander Main y Dan Beeton fue difundido hoy por la red social Facebook, luego de que una nota de prensa difundida el fin de semana señalaba que ellos hallaron en wikileaks que EEUU estaba detrás de un plan de magnicidio. Esa versión dio lugar a un nuevo distanciamiento en las relaciones ya deterioradas entre Estados Unidos y Bolivia.

“A contrario de lo que declaran algunos medios, no hemos afirmado que los cables de la embajada de EE.UU. en La Paz revelan que los EE.UU ‘habrían financiado’ un plan ‘para asesinar’ a Presidente Morales, ni que los EE.UU estuvieran directamente involucrados en un plan de golpe de Estado en contra del gobierno Boliviano.

Lo que hemos afirmado es que los documentos de la embajada estadounidense en La Paz, que habían sido citados primero por WikiLeaks, muestran que la embajada estadounidense estaba en contacto regular con líderes de la oposición Boliviana en agosto y septiembre de 2008, durante la campaña de violencia y destrucción que se llevó a cabo en los departamentos de la Media Luna”, dice el comunicado.

A partir de la versión hoy desmentida por los investigadores, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, dijo que esta versión constatan la estrategia de EEUU en contra del gobierno de Evo Morales. “ Por lo tanto no hay la posibilidad alguna de imaginación o de un invento de parte del gobierno del presidente Evo”, matizó.

Sin embargo, los investigadores aseguran que la embajada de Estados Unidos desarrollaba un plan para la evacuación de ciudadanos estadounidenses en momentos en que la crisis política estaba en su auge.

Ahora bien

En el informe difundido hoy asegura que su investigación les lleva a concluir que EEUU financiaba a organismos opositores de la llamada Media Luna, a cuyos líderes el gobierno les acusó de llevar adelante un plan separatista.

También, estos documentos revelan que el gobierno de EE.UU dio un apoyo financiero a entes opositoras, incluyendo los departamentos de la Media Luna que querían separarse de Bolivia. Junto con los demás cables ya mencionados, estas revelaciones generan muchas preguntas importantes y serias sobre las relaciones entre el gobierno estadounidense y la oposición boliviana en 2008 y después. Sin embargo, los cables no presentan evidencia de que los EE.UU. estaba financiando un golpe, ni un complot para asesinar a Morales, como ha sido afirmado por algunos periódicos en días recientes.

Opinan también que el gobierno de EEUU mantenía contacto “más estrechos y regulares con líderes opositores que lo que se sabía en 2008”.