Vuelta al Sur, es la gira que traerá a David Lemaitre y su trío a Sudamérica. El músico boliviano tocará junto a su banda en ciudades de Bolivia y  Argentina durante el mes de octubre.

Lemaitre admite que es “un sueño” tocar en su tierra natal por primera vez, "esta idea existe hace mucho tiempo y no puedo creer que la gira sea ya una realidad... Para mí es mágico poder volver y traer la música, mi banda conmigo. Además será también muy especial que ellos puedan conocer finalmente a mi país y a su gente".

El trío lo conforman Joachim “Joda” Foertser, un baterista - percusionista que mezcla elementos electrónicos y toca una batería hecha de un maletín de cuero, Sebastían Schlecht, violinista-tecladista y explorador de sonidos como los que produce un sintentizador de botellas de vino, y las composiciones de Lemaitre.

Se presentarán en La Paz en el Teatro Municipal el 6 de octubre y al día siguiente en el Teatro Nuna, en Cochabamba  tendrán un concierto el 8 del mismo mes en La Muela del Diablo y en Santa Cruz el 12 se presentarán en Panorama. Posteriormente viajarán a Argentina para participar del Festivalitohoho en La Plata el 13 de octubre y el 14 en la ciudad de Buenos Aires en el espacio Usina del Arte. 

Trayectoria

Después de su participación en el festival internacional Eurosonic, la disquera independiente PIAS lanzó internacionalmente el disco Latitude de David Lemaitre. Desde entonces, ha tenido más de 200 conciertos en tres años por Francia, Holanda, Bélgica, Suiza, Inglaterra y Austria.

Su album Latitude está relacionado con el viaje, "como músico uno viaja constantemente. Siempre a punto de llegar y siempre a punto de partir de nuevo", manifiesta Lemaitre. El trabajo del album es una amalgama entre folk, electrónica e indie-pop. Su máximo éxito es Megalomanía, definida como una sátira indie-pop a una generación enamorada de sí misma, tuvo mucho éxito desde el verano de 2013. Actualmente Lemaitre está trabajando en su segundo disco.

En los 14 años que vive en Alemania, Lemaitre estudió jazz, tocó en cafés y trabajó en estudios de sonido para aprender a producir. Finalmente, tras mudarse a Berlín puso un estudio de grabación y comenzó a trabajar en su primer disco. Durante toda su vida estuvo influenciado por la música, desde Violeta Parra hasta Pink  Floyd. “No hago música electrónica, pero me interesa buscar ese punto medio entre intimidad y detalle en la produccicón, tratando a todos los instrumentos como si fuersen instrumentos de ritmo”, mantiene David.