ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, hizo un llamado hoy a los gobiernos europeos para que permitan el desembarco inmediato de 507 personas rescatadas recientemente en el Mediterráneo central, que permanecen varadas en el mar y necesitan asistencia humanitaria.

“Esta es una carrera contrarreloj”, declaró Vincent Cochetel, Enviado Especial de ACNUR para el Mediterráneo Central. “Se esperan tormentas en los próximos días y la situación a bordo de los dos barcos sin duda seguirá empeorando. Dejar en alta mar y en estas condiciones meteorológicas a personas que han huido de la guerra y la violencia en Libia sería infligir aún más sufrimiento a su sufrimiento. Se les debe permitir desembarcar de inmediato y tener acceso a una ayuda humanitaria que tanto necesitan”.

151 personas permanecen a bordo del barco de la ONG española Open Arms y 356 más han sido rescatadas en los últimos días por el Ocean Viking. Open Arme pidió hoy a la embajada española en Malta asilo para 31 menores. El capitán del buque, Marc Reig, solicitó a la embajada que tramite el procedimiento de asilo de manera urgente dada la situación de incertidumbre en la que se encuentra el buque Open Arms, que permanece en aguas internacionales.

El barco se encuentra a 29 millas de la isla italiana de Lampedusa desde el 1ro de agosto, cuando rescató a 55 inmigrantes, tras lo que socorrió a otros 69 un día después, y el pasado sábado salvó las vidas de otras 39 personas. Todas ellas provienen de las costas de Libia.

"ACNUR reitera que los intensos combates en Libia, así como las violaciones de derechos humanos de las que dan cuenta números informes, incluyendo la detención arbitraria, significa que Libia no puede ser considerada un puerto seguro y que nadie debe ser retornado allí", afirma ACNUR a través de un comunicado.

El buque lleva pidiendo sin éxito este último tiempo desembarcar en un puerto seguro tras la negativa de Italia y Malta, que cerraron sus puertos a los inmigrantes. "Se tiene que proporcionar un puerto de desembarco seguro de inmediato y compartir la responsabilidad entre los Estados para la acogida tras el desembarco", dice el comunicado de ACNUR.

En el Mediterráneo central es donde más gente muere, comparando las llegadas y muertes en las rutas del Mediterráneo occidental y oriental, por lo que la agencia de la ONU, considera que "es necesario que se incremente la capacidad de búsqueda y rescate en el Mediterráneo central" y subraya la importancia de los barcos de las ONG que "debe ser reconocido y apoyado. Sus esfuerzos están salvando vidas y no deben ser estigmatizadas y criminalizadas por ello".

"Se necesitan más esfuerzos para poner fuera de peligro a los refugiados en Libia. Nadie debería sentir que es mejor arriesgar su vida y las vidas de sus familias en estas travesías por mar, que a menudo resultan mortales. Es preciso aumentar y agilizar las vías legales para acceder al asilo, como por ejemplo las evacuaciones y el reasentamiento", pide ACNUR.