El expresidente Fernando De la Rúa, de 81 años, murió este martes a las 7:10 en el Instituto Fleni de la ciudad bonaerense de Escobar, donde había sido internado por una falla cardíaca y renal desde enero de este año. El Gobierno decretó tres días de duelo nacional por la muerte del exmandatario.

Los restos del exmandatario serán velados, a partir de las 14, en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso de la Nación. Mañana serán trasladados al Parque Memorial de Pilar.  De la Rúa sufrió dos infartos en el último año y se ha sometido a varias angioplastias por sus problemas cardíacos.

El presidente actual de Argentina, Mauricio Macri, compartió su pésame en un mensaje de Twitter. "Lamento el fallecimiento del ex presidente Fernando de la Rúa. Su trayectoria democrática merece el reconocimiento de todos los argentinos. Acompañamos a su familia en este momento", escribió Macri.

La gestión de  Fernando De la Rúa

De la Rúa asumió la presidencia de Argentina el 10 de diciembre de 1999, tras obtener 48,5% de los votos. Para entonces, la economía argentina ya presentaba síntomas de una gravísima crisis que haría colapsar al país dos años después.

En 2000 el desempleo alcanzaba a casi 15% de la población activa y 30% de los argentinos estaba en situación de pobreza; una cifra importante, pero aun así inferior a la que se había encontrado cuando asumió como presidente. Las medidas de su equipo económico, centradas en el ajuste fiscal y los recortes presupuestales, no solo no dieron resultado, sino que fueron agravando la situación.

Obligado por sus compromisos con el Fondo Monetario Internacional, el Gobierno aplicó recortes de hasta 20% en los salarios de los empleados públicos, los docentes y los integrantes de las fuerzas de seguridad. También las jubilaciones sufrieron recortes y decenas de miles de empleados públicos fueron despedidos, entre otras medidas tendientes a reducir el presupuesto.

Para comienzos de 2001, más de la cuarta parte de la población activa estaba sin empleo, un máximo histórico para el país sudamericano, y la economía seguía su carrera hacia un abismo que se volvía cada vez más inevitable. En diciembre de 2001 comenzó la catástrofe.

El primer día de diciembre, el entonces ministro de Economía, Domingo Cavallo, estableció el llamado "corralito", limitando la cantidad de dinero que los ciudadanos podían retirar de los bancos. La medida incluía la prohibición de enviar dinero al exterior del país y la obligación de realizar la mayor parte de las operaciones comerciales mediante cheques, tarjetas de crédito o de débito.

El 19 de diciembre se produjeron saqueos a supermercados en varias ciudades del país, al tiempo que los enfrentamientos entre la población y las fuerzas de seguridad se agravaban, y provocaron la muerte de 36 personas.

Sin apoyo político ni económico, el presidente tomó la decisión de dimitir. A las 19:45 del 20 de diciembre De la Rúa presentaba su renuncia. Minutos después, De la Rúa subió a la azotea de la Casa Rosada y dejó el edificio en un helicóptero, una acción que será por siempre el símbolo de la crisis más grave que sufrió Argentina en su historia.