La caravana Viacrucis del Migrante, que partió el 25 de marzo de los límites con Guatemala llegó a la frontera mexicana con EEUU, donde acampan desde el domingo esperando que el gobierno de Donald Trump les otorgué un permiso de asilo. La caravana ha generado fuertes protestas del presidente de Estados Unidos, la organización Pueblos Sin Fronteras denuncia que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (U.S. Customs and Border Protection, CBP) de EEUU señaló que no podía aceptar más solicitudes de asilo por el momento.

“Los agentes fronterizos de EE. UU. Se niegan a permitir que 150 solicitantes de asilo soliciten asilo a familias y niños para solicitar asilo en el puerto de entrada de San Isidro. A pesar de los intentos de la policía local y de las agencias de inmigración para persuadir a las familias de salir de la plaza, el grupo de madres y padres votaron anoche para permanecer en la plaza justo fuera del puerto de entrada, hasta que el cbp esté dispuesto a seguir la ley y procesar sus Solicitudes”, publicó la organización en su cuenta de Facebook.

Según Pueblos sin Fronteras, “el cbp es el mayor organismo de aplicación de la ley en el país, y es capaz de detener, transportar y encarcelar a miles de personas en un día, pero está fingiendo que no tienen la "capacidad" para aceptar a 150 padres refugiados y niños cuya llegada Se ha anticipado y comunicado semanas por adelantado”.

​La oficina de la Patrulla Fronteriza en el distrito de San Isidro en la ciudad estadounidense de San Diego (suroeste) no procesará a más personas que esperan ingresar a EEUU "hasta que haya espacio disponible", dijo el comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU, Kevin McAleenan, en un comunicado el 29 de abril, publicó ABC News.

La movilización partió con unos 1.500 integrantes y tuvo como objetivo reclamar que no se criminalice la inmigración ni la solicitud de asilo y que se permita a las familias de inmigrantes permanecer unidas.

La posición de Trump

"Las caravanas vienen en camino, se están volviendo más peligrosas", escribió a través de Twitter el jefe de la Casa Blanca el 1 de abril y después señaló que su país "estaba siendo robado" por los inmigrantes sin documentos.

"México tiene el poder absoluto de evitar que estas grandes 'caravanas' de personas ingresen a su país", afirmó en uno de los varios mensajes hostiles que lanzó contra la caravana.