Los soldados cascos azules de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en República Centroafricana (Minusca) fueron denunciados por presuntamente drogar y violar a una adolescente en la localidad de Bambari, el pasado 30 de septiembre, según el informe de la organización. 

La víctima de 16 años relató que volvía de un funeral cuando unos cascos azules le ofrecieron una taza de té y horas después se despertó prácticamente desnuda y tirada en el suelo.

Tras las sospechas de posible violación, la joven fue trasladada a un hospital donde se sometió a diversas pruebas que certificaron que había sido víctima de sedantes y de abuso sexual.

La denuncia de la joven llega cuando el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, está preparando una reunión con las víctimas de abusos sexuales de los cascos azules cuando visite República Centroafricana, a finales de octubre.

Existen más de 2.000 denuncias contra cascos azules y otro personal de la ONU por abuso y explotación sexual en todo el mundo. Más de 300 de las denuncias son de víctimas menores de edad.