El presidente de Haití, Jovenel Moïse, reclamo ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que esta organización debe asumir todas sus responsabilidades por el daño causado a su pueblo al introducir el cólera en su país el 2010.

"Ha llegado el momento de que la ONU dé total sentido a sus principios fundamentales, asumiendo todas sus responsabilidades ante el daño causado al pueblo haitiano", dijo Moïse en su discurso.

Moïse agradeció la presencia de la Minustah por 13 años en su país. Pero, aseguró que "no podría dejar de recordar los actos abominables de explotación violencia sexual y la introducción de la epidemia del cólera".

"Estas consecuencias de la presencia de la comunidad internacional entrañan la obligación moral de dar respuestas encaminadas a brindar los recursos necesarios para eliminar el cólera de Haití", aseveró.

"La lista de víctimas del cólera, cerca de 10.000, sigue aumentando y los huérfanos del cólera son decenas de miles", dijo Moïse.

El nuevo secretario general de la ONU, António Guterres, adoptó un nuevo enfoque y reconoció la responsabilidad del organismo y creó el Fondo Fiduciario para la Respuesta al Cólera de 400 millones de dólares, que hasta ahora solo ha logrado reunir 2,6 millones de dólares. La ONU decidió que la Minustah termine su trabajo en octubre de este año, e iniciará una nueva misión, la Minujusth, que se centrará en apoyar a la policía haitiana y promover el Estado de derecho.

El presidente haitiano agradeció que la Asamblea General haya aprobado la transferencia de 40,5 millones de dólares no gastados del presupuesto de la Minustah para la asistencia de las víctimas del cólera y para fortalecer los sistemas de saneamiento en Haití.

La Minustah debía contribuir a frenar la violencia y la inestabilidad política de Haití que se produjo después del derrocamiento del presidente Jean-Bertrand Aristide en 2004. Se quedó para apoyar al país después del terremoto de 2010, que causó la muerte de 220.000 personas.

En los últimos años, se ha acusado a la Organización de introducir el cólera, y de explotación y violencia sexual contra la población civil, en especial mujeres, niños y adolescentes.