Mereció más, pero chocó con su propia ineficacia. Bolívar perdió ante Junior en Colombia (3-0) y quedó eliminado de la Conmebol Libertadores. Ahora, jugará la fase de grupos de la Copa Sudamericana.

Y es que Bolívar dominó gran parte del partido – sobre todo en el segundo tiempo- pero siempre le faltó el gol. Eso sí, de entrada pagó cara una distracción defensiva y se vio en desventaja a los 12 minutos, gracias a un gol de Miguel Borja.

Precisamente con ese gol, el equipo colombiano lograba la clasificación, gracias al gol de visitante que anotó la semana pasada en La Paz (1-2).

Por eso, Bolívar se vio obligado a buscar el gol y cambiar el libreto diseñado por su técnico, que puso una línea de 5 en la defensa para mantener el cero en su arco.

Así, poco a poco, la Academia empezó a adelantar líneas y a hacerse con el control del partido, ante un equipo colombianos que se dedicó a tratar de pausar el ritmo del encuentro y prácticamente no encontraba el camino para inquietar al celeste.

Empero, lo mejor de Bolívar se vio en el segundo tiempo. Sobre todo con jugadas a balón parado y aprovechando la buena pegada del español Granell, Bolívar se vio cerca del empate en más de una ocasión, pero entre su falta de puntería y algún rebote en las piernas rivales, no pudo empatar el encuentro.

Ya a los 69 minutos una tonta expulsión cambió por completo el partido. El delantero argentino de Bolívar, Leonardo Ramos,  agredió a un rival y dejó a su equipo con 10.

El hecho – reprochable- no cambó las ganas de Bolívar, pero sí la posición del Junior, que se animó a ir un poco más hacia adelante y fue por eso encontró el segundo gol a los 81 minutos, gracias a una buena jugada colectiva y un buen remate de John Pajoy.

Aún con el 2 a 0, Bolívar estaba a un solo gol de forzar a que la llave se defina por penales y por eso se fue a buscar ese tanto que lo mantenga con vida.

Estuvo demasiado cerca a los 90, cuando un centro de Granell fue cabeceado por un defensa colombiano contra su arco y casi se convierte en gol, pero fue despejado sobre la línea de sentencia.

Ya en el 94, Junior aprovechó que todo Bolívar estaba en arco rival y con un contragolpe anotó el tercer tanto del partido, liquidando cualquier esperanza del conjunto boliviano.

Así, Bolívar quedó fuera de la Libertadores y pasó a la Sudamericana, donde se encontrará con un viejo conocido: Wilstermann de Cochabamba, además de Arsenal de Argentina y Ceará de Brasil.