The Strongest no tuvo problemas para superar a un alicaído Guabirá y, a espera de lo que haga San José mañana, es el líder solitario del Clausura.

El partido fue más fácil de lo que se preveía para los de Farías, que ya habían anotado el primer gol antes de cumplirse el minuto de partido, aunque fue anulado por posición adelantada.

Aún así fue un aviso de lo que se venía. Los de Achumani pudieron el pie en el acelerador de arranque y por eso ya ganaban por 4 goles a 0 antes de cumplirse la primera media hora de juego. Los goles fueron obra de Bejarano, Novoa e Ibargüen, en dos oportunidades.

Con la cómoda ventaja, los locales empezaron a administrar el ritmo del partido y nunca se vieron complicados por un rival que cayó vencido.

Así, el segundo tiempo fue un mero trámite para el Tigre que aumentó la cuenta gracias a Pablo Escobar, en dos oportunidades.

Así, el Tigre volvió a la senda del triunfo después de dos duras derrotas consecutivas y, lo más importante, volvió a demostrar un buen juego después de mucho tiempo.